Son muchos los anuncios y ofertas que nos venden sanidad privada por apenas unos euros. Sin embargo, cuando buscas ese precio entre las aseguradoras, la verdad que encuentras es muy distinta. Estas son las mentiras que esconden los seguros médicos muy «baratos».
Es probable que esta situación te resulte familiar. Estás navegando por Internet y, de repente, te encuentras con una oferta maravillosa. «¡Tu seguro médico desde solo 12 euros al mes!». ¿Quién no querría cuidar de su salud y la de los suyos por tan poco dinero?
Nosotros hemos investigado para ver qué hay detrás de estas ofertas tan, aparentemente, perfectas. Y es que, en realidad, hay dos grandes mentiras detrás de esos seguros médicos que debes conocer.
1. Pocos servicios por poco dinero
No puedes pedir peras al olmo: los servicios de salud no son gratis. Si una compañía ofrece un seguro médico a partir de 12 o 14 euros, es lógico que no te incluya lo mismo que si pagaras más.
Por unos precios tan bajos, solo podrás acceder a pocas coberturas. Es posible que no cubran la hospitalización, las urgencias, ciertas intervenciones y tampoco pruebas diagnósticas de alto nivel. En realidad, son baratos porque están muy limitados.
Esto no significa que tengas que gastar una millonada para conseguir un buen seguro médico. Puedes encontrar grandes ofertas por poco dinero, pero lo más importante es que sus coberturas y características se adapten a tus circunstancias. ¿De qué sirve un seguro médico que no te cubrirá cuando lo necesites?
2. Los copagos son muy altos
La segunda gran mentira de los seguros médicos muy «baratos». La mensualidad es muy baja, pero no hay ningún ahorro: tendrás que pagar por ir al médico. Al final, la factura será mucho más elevada que esos 12 euros al mes que prometía el anuncio.
Pongamos un ejemplo. Una compañía ofrece para una persona de 30 años una póliza por solo 14,50 euros. Es un buen precio, así que investigamos un poco más y vemos que no incluye ciertas coberturas como las urgencias o la rehabilitación. Y nos encontramos con algo más:
— Una prueba de alta tecnología: 70 euros.
— Una consulta al especialista: 16 euros.
— Una clase de preparación al parto: 70 euros.
— Una consulta con el pediatra: 10 euros.
No solo tienen servicios limitados, sino que los que ofrecen tienen un copago muy alto. Pagas 14,50 euros al mes, pero tienes que sumarle más dinero cada vez que vayas al médico. Al final, pagamos más que si contratamos un seguro médico más completo y sin copagos.
Estos seguros médicos pueden ser muy baratos, pero solo si nunca los usas. En cuanto lo necesites, el precio se disparará y dejará de ser tan bajo. ¿Compensa pagar cada vez que vas al médico?
Cuidado con los «desde»
Es frecuente que estas suculentas ofertas de seguros médicos estén acompañadas de un «desde»: «¡El mejor seguro desde 12 euros!», «Seguro médico desde 9 euros»… No tienen por qué ser ofertas engañosas, pero nos pueden confundir. En realidad, ese «desde» puede ocultar el copago, que hace que esos 12 euros al mes se multipliquen con cada visita al médico.
En salud, el precio no lo es todo
Las mentiras de los seguros médicos nos enseñan una valiosa lección: el precio no es lo más importante. Por eso, si quieres acudir a la sanidad privada, debes buscar un seguro no solo barato, sino con buenas coberturas y condiciones.
— No pagues cada vez que vayas al médico. Acudir a la sanidad privada nos permite ahorrar listas de espera, ser atendidos por profesionales de prestigio y disponer de la mejor tecnología en tratamientos y pruebas diagnósticas. Todo esto puede suponer un alto coste si escogemos un seguro con copagos, aunque el precio base sea muy bajo. Además, estos seguros básicos no incluyen muchos de estos servicios y nos obligan a renunciar a una sanidad privada de más calidad.
— Elige un producto adaptado para ti. Las coberturas son lo más importante. Tu seguro médico tiene que incluir aquellas que tú y los tuyos necesitáis: urgencias, hospitalización, cirugías, atención en el extranjero, quimioterapia… No te dejes engañar por las mentiras de los seguros médicos muy «baratos»: contrata lo que de verdad vayas a utilizar e infórmate de qué cubre cada compañía.
— Escoge una empresa de confianza y que te dé facilidades. No todas las aseguradoras ofrecen el mismo tipo de servicios. La atención al cliente y la telemedicina son características que no debes pasar por alto.
¿Cómo evitar caer en las mentiras de los seguros médicos?
La próxima vez que te encuentres con una oferta tan barata, recuerda las dos grandes mentiras de los seguros médicos: pocas coberturas y alto copago. Para evitarlas, el mejor consejo que podemos darte es que siempre dudes. ¿De verdad pueden ofrecerme un producto adaptado a mí y de calidad por solo 12 euros al mes?
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