Un plan de retribución flexible supone que el trabajador obtiene menos ingresos económicos a cambio de que la empresa pague algunas cosas por él, como un seguro médico, un plan de pensiones, una guardería…
Los planes de retribución flexible consisten en que la empresa se encarga de gestionar productos y servicios que necesitan sus empleados, como las comidas (con tiques restaurante) o el transporte (mediante abonos).
Esto supone ventajas para la empresa y para los empleados. Como, por ejemplo, interesantes descuentos, ya que la empresa conseguirá mejores precios al negociar para un colectivo, y un mejor tratamiento fiscal para todos, pues los beneficios sociales no tributan igual que el salario.
Pero hay algunas cosas que conviene tener en cuenta.
1. La empresa debe ofrecer productos y servicios que el trabajador necesite
No todo el mundo quiere que le paguen la guardería, bien porque no tiene niños ni piensa tenerlos, o bien porque los hijos ya han dejado de ser pequeños. En cambio, todos, absolutamente todos, tengan la edad que tengan, precisan asistencia médica. El seguro de salud es el beneficio más valorado, incluso por encima de otros aspectos esenciales, como la formación. El Barómetro de Seguros de Salud, que realiza cada año Adeslas, confirma que también en 2018 el seguro de salud es el beneficio social más valorado tanto por los empleados como por las organizaciones, y que el 86 % de las empresas ya lo tienen contratado.
2. El plan de retribución flexible ahorra dinero a la empresa
Cuando la empresa paga servicios que necesita el trabajador puede descontárselos de su nómina. Con un plan de retribución flexible, por un lado, ahorrará en su salario: le paga menos nómina a cambio de hacerse cargo de su seguro médico. Pero eso no significa que la empresa ni pierda ni gane: la empresa ahorra dinero porque pagar el seguro de salud de sus trabajadores es un gasto deducible en su impuesto de sociedades, no tributa como un ingreso al trabajador.
3. El dinero no es el único beneficio empresarial
El ahorro que supone contratar un seguro de salud para los empleados es una ventaja considerable para la empresa, pero hay otras igualmente importantes, o más, cuando se trata de retener talento. Los trabajadores, especialmente los jóvenes, valoran ciertos incentivos incluso por encima del salario (siempre que este sea justo). La posibilidad de teletrabajar, tener horarios flexibles que les permitan compatibilizar la vida laboral y personal o contar con beneficios gracias a la empresa, como un seguro médico, un plan de pensiones, un renting de coche…, fidelizan a los empleados y convierten a determinadas corporaciones en las favoritas para trabajar. Eso sin contar la reducción del absentismo que implica para la empresa el que sus trabajadores accedan rápidamente y sin listas de espera a los servicios médicos.
4. El plan de retribución flexible tiene ventajas fiscales para el trabajador
El plan de retribución flexible significa que el trabajador ya no pagará por sí mismo el seguro médico, sino que lo hará la empresa por él. Si la corporación lo considera necesario, lo descontará del salario, pero incluso en ese caso saldrá ganando el trabajador. Le conviene que lo pague su empresa en vez de él, porque así paga menos impuestos, pues no tributa por la cuantía económica del importe del seguro, dado que no se considera ingreso ni siquiera en especie hasta 500 € anuales. Esto es, supone un importante ahorro puesto que paga menos impuestos en el IRPF. Se calcula que, gracias a las exenciones fiscales, el trabajador ahorrará más del 10 % con este sistema.
5. El beneficio puede extenderse a la familia del empleado
Ese beneficio fiscal del punto anterior no es solo para el empleado, sino que, si tiene familia, se puede ampliar al cónyuge o los hijos que contraten también el seguro. Por cada miembro de la unidad familiar que suscriba el seguro médico puede descontarse también hasta 500 € anuales.
6. La importancia de saber comunicarlo
El plan de retribución flexible no siempre se entiende correctamente en todas sus implicaciones. Si la empresa sabe comunicar sus ventajas a los empleados, tendrá un plus, un atractivo más, una ventaja competitiva en el mercado laboral para atraer y retener el talento. El salario no es la única forma de incentivar a los empleados.
7. Permite ahorrar dinero en la compra de bienes y servicios
No es lo mismo contratar un seguro médico por uno mismo, donde se puede incluso ver online todos los precios de las compañías en nuestro comparador, conocer sus coberturas y contratarlo sin más por el importe establecido, que negociar para un colectivo con una aseguradora. El precio será notablemente inferior al que pueda conseguir un solo individuo.
8. Hay que estudiar bien las diversas opciones
Muchas empresas no pueden soportar más gastos, pero saben que mejorar el bienestar de los trabajadores es incrementar la productividad. Dado que el Reglamento del IRPF incluye exenciones para determinados productos o servicios cuando estos son contratados por una empresa para sus empleados, sería absurdo no aprovecharlo.
El seguro médico no tiene por qué ser un beneficio social puro. La empresa tiene diversas opciones para contratarlo:
- Pagar el 100 % del coste del seguro médico.
- Pagar una parte y repercutir al empleado otra parte.
- Repercutir al empleado todo el importe.
- Gestionar el seguro para todos los empleados, pero pagarlo solo a algunos (por ejemplo, a los directivos).
Muchos trabajadores pagan por sí mismos el seguro médico cuando su empresa podría hacerlo reduciendo en la misma cuantía el salario sin ningún coste añadido para la empresa y con la correspondiente ventaja fiscal. Además, la empresa continúa cotizando a la Seguridad Social por lo que suponga el coste del seguro.
Por otra parte, la adhesión del trabajador al seguro debe ser siempre voluntaria y lo deseable es que la empresa lo negocie en acuerdo colectivo para que los empleados sepan que nadie les va a quitar un beneficio obtenido tan importante como su seguro de salud.
9. Los autónomos también salen ganando
Muchas empresas externalizan el trabajo valiéndose de trabajadores autónomos a los que necesitan, pero a quienes no pueden incorporar a su plantilla. Las empresas podrían extender la oferta a estos trabajadores, porque lo harían a mejor precio y porque sería un beneficio para ellos. Los trabajadores por cuenta propia pueden minorar sus ingresos en la cantidad que destinen a pagar su seguro médico, hasta el límite de 500 €, y también, como en el caso de los trabajadores por cuenta ajena, pueden hacerlo extensible a cada miembro de la unidad familiar que esté incluido en la póliza.
10. Comparar y buscar asesoramiento
Contratar un plan de retribución flexible no incrementa los costes de personal de la empresa, por eso es tan beneficioso para el trabajador como para la corporación.
Todos estos supuestos comentados no tendrán secretos para un responsable de recursos humanos. Sin embargo, a correcta explicación a los empleados, la obtención del tratamiento fiscal más ventajoso y la contratación en las mejores condiciones con las compañías de seguros médicos sí requieren que un corredor de seguros especializado en empresas asesore y vele para conseguir las mejores ofertas. Incluso será imprescindible para renegociar las condiciones cada año con las distintas aseguradoras. Sea cual sea la actividad empresarial y el número de empleados, si lo deseas, llámanos. Somos expertos en lograr las condiciones que tu empresa necesita. Y lo hacemos gratis.