Nos gusta que nuestros hijos aprendan idiomas, que sean autónomos y sepan desenvolverse en un mundo cada vez más global, pero sin correr riesgos. Los seguros médicos para estudiantes son imprescindibles.
Cada vez es más frecuente estudiar fuera del lugar de origen. Las oportunidades no vienen a buscarnos a casa y hay que estar preparados para la globalización. Muchos adolescentes y jóvenes españoles salen de nuestro país para formarse en otro. Los padres nunca van a estar tranquilos, ¡es normal! Pero necesitan confiar al menos en que sus hijos estarán atendidos si les ocurre algo mientras ellos no están a su lado para ayudarlos. Esto solo es posible con los seguros médicos para estudiantes.
La seguridad social no es igual en otros países
Los chicos que cuentan con Seguridad Social en España tienen acceso a la sanidad pública en Europa. Para ello, antes de salir de España los estudiantes deben solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea en la Seguridad Social, que les permite acceder a los sistemas nacionales de salud del Espacio Económico Europeo más Suiza en las mismas condiciones que los nacionales de esos países. Esto significa que si el sistema público del país receptor es de copago o de reembolso, la atención se les prestará a los españoles de la misma forma.
La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) es gratuita, y se solicita por internet.
Pero esto no es suficiente. Supongamos que nuestro hijo se pierde en un día de excursión a la montaña. Por supuesto, le buscarán, le rescatarán y le trasladarán a un hospital si es necesario; pero le pasarán la factura por todos los gastos, excepto por el tratamiento médico. Además, si queremos ir a verle, correrá por nuestra cuenta, y en el caso de que deba permanecer ingresado, nosotros no podremos estar con él sin pagar nuestros gastos.
La TSE no sirve para salvamento ni repatriación, ni para urgencias en la sanidad privada. Solo cubre todos los tratamientos que no puedan posponerse.
Ante un embarazo, por ejemplo, cubrirá las pruebas, la asistencia médica y el parto no programado. Pero si hay intención de dar a luz en otro país, es necesario solicitar autorización y estar sujetos a que pueda no cubrirse todo.
Cuando se padece una enfermedad crónica, el joven afectado tiene derecho al tratamiento durante su estancia en el extranjero, pero tendrá que solicitar una autorización para recibir la atención médica.
Hay muchas cosas que pueden ocurrir y que no están cubiertas por la TSE, tales como gastos de repatriación, salvamento, pérdida o robo de objetos personales, regreso a casa por algún problema urgente, necesidad de que los padres acudan con el hijo por ingreso hospitalario…
Y también puede ocurrir que nuestros hijos no estudien en un país europeo, sino en Estados Unidos, donde todo lo anteriormente dicho no sirve de nada.
Las embajadas y consulados no pagan gastos médicos, ni de viaje, ni de alojamiento, ni de repatriación. Por eso es preciso contratar seguros médicos para estudiantes en el extranjero.
Seguros médicos para estudiantes
No hay obligación de tener un seguro de viaje cuando enviamos a nuestros hijos fuera de España, pero sí deberíamos contratar seguros médicos para estudiantes que cubrieran un amplio espectro de eventualidades, para poder vivir tranquilos.
Obviamente, ninguna compañía va a asegurarnos al cien por cien que cubrirá cualquier problema pase lo que pase; todas tienen exclusiones, pero un asesor experto en seguros, como nosotros, podrá ayudarnos a elegir el mejor seguro para nuestros hijos entre las ofertas de todas las compañías.
Qué seguro médico elegir
Los estudiantes erasmus disponen de un seguro escolar durante su estancia en el exterior, pero deben informarse en su universidad sobre el detalle de las prestaciones, para que no haya sustos en el caso de que existan aspectos esenciales no cubiertos.
Lo más cómodo sería contratar una póliza que permitiera a nuestros hijos acudir a cualquier centro, el más próximo, el mejor, el que ellos quieran.
Necesitamos que los seguros médicos para estudiantes cubran:
- Urgencias. También en el domicilio.
- Asistencia primaria. Medicina general, pediatría, enfermería…
- Especialidades médicas. Todas, como dermatología, traumatología, oftalmología, ginecología…
- Pruebas diagnósticas. Ecografías, radiografías, escáneres, análisis…
- Intervenciones quirúrgicas. Todas las que sean necesarias, con o sin hospitalización.
- Hospitalización. Sin límite, y también en UCI y UVI.
- Odontología. Al menos de urgencias.
- Envío de medicamentos. Esto es importante en otro país, donde los nombres de los fármacos varían y no siempre hay una farmacia abierta o el coche familiar para llegar hasta ella.
- Desplazamiento y estancia de un familiar. Si les pasara algo a nuestros hijos, querríamos estar a su lado. Un seguro médico que cubra nuestro viaje y estancia es muy importante.
- Vuelta a casa. Ante un accidente o enfermedad, los padres necesitamos que nuestro hijo vuelva a casa cuanto antes. Busquemos seguros médicos para estudiantes que cubran su traslado.
- Asesoramiento jurídico. A veces hay requisitos complejos a la hora de solicitar visados, permisos o de hacer un contrato de trabajo, un certificado, poner una denuncia por robo, reclamar una indemnización por accidente…
- Segunda opinión médica. Porque en ocasiones no nos convence un diagnóstico y porque todos podemos equivocarnos.
- Teléfono de ayuda 24 horas. Queremos que nuestros hijos puedan consultar cualquier problema, que no se angustien si algo les preocupa, que tengan asesoramiento médico a cualquier hora del día o de la noche.
- Gestiones on line. ¡Por supuesto! Estamos hablando de estancias en otro país y de que nuestros hijos son nativos digitales. No hay que aceptar compañías que no permitan hacer todas las gestiones a través de internet.
En ocasiones, los seguros médicos para estudiantes cubren también la responsabilidad civil, porque nunca sabemos nunca qué puede ocurrir si nuestro hijo mete la pata en algo por negligencia o descuido, y es preferible que pueda resolverlo el seguro antes de llevarnos a la ruina…
Algunos seguros médicos para estudiantes tienen otras coberturas extra, más propias de los seguros de viaje, como pérdida de vuelos o conexiones, robos, daños en el equipaje, gastos de gestión por robo o pérdida de documentación, etc.
Modalidades de seguros médicos para estudiantes
Esa es otra cuestión que debemos tener en cuenta. El seguro médico no solo les sirve cuando están fuera, sino cuando regresan para un fin de semana o durante unas vacaciones. Los seguros médicos para estudiantes pueden tener copagos en España pero no fuera, ser de reembolso (incluso del 100 % de lo gastado fuera del país), otros tienen un límite de prestaciones… Las cuotas varían de unas compañías a otras. Y tampoco es lo mismo un seguro médico para un estudiante erasmus, en un curso de verano, durante un semestre, unas prácticas o unos meses de au pair… Hay que dejarse aconsejar por un experto que busque lo que más se adapte a nuestras necesidades familiares y al caso de nuestro hijo.
Y si ya tienes un seguro médico, ahora es tiempo de cambiarte. Puede que encuentres uno más barato en nuestro comparador.